Metaverso y Ciberseguridad

Si algo nos ha dejado la pandemia del COVID19 es un renovado interés en lo tecnológico. Tanto empresas como particulares se han volcado a las tecnologías digitales para trabajar, compartir y divertirse. Y es que, con tanta cuarentena, los zoompleaños y calls de trabajo se han vuelto una cosa del día a día mientras vamos volviendo -quien sabe cuándo- a la normalidad. Y es así que según la consultora IDC pronostica un crecimiento del 9% en América Latina en materia tecnológica, mientras que a nivel global esa cifra sube a un 4%. Si bien está lejos del 6 y monedas que alcanzó en el pico de la pandemia, sigue siendo el doble de la inversión del año 2020.


Una de las tendencias más importantes es la seguridad de la información. En este contexto de teletrabajo, remoto y a distancia, las filtraciones e incidencias de seguridad son moneda corriente. Para eso es que aparecen nuevas soluciones, como por ejemplo el cifrado homomórfico. Este tipo de encriptación permite proteger los datos pero a su vez poder accederlos y analizarlos sin necesidad de desencriptarlos. Esto es fundamental para proteger la información, ya que al no desencriptarla es imposible robarla. Se estima que este tipo de cifrado y otros similares recibirán una inversión de unos 250 millones de dólares durante 2022.
De la misma manera, protegerse ante ciberataques es una prioridad. Durante los últimos años hemos visto ataques en una escala inusual, ya que las herramientas de los hackers han evolucionado a tal punto donde literalmente pueden tener de rehén la información de una empresa o una persona. Entonces nos pueden pedir un rescate de dinero en forma de criptomonedas, y al utilizar VPNs y programas hechos a medida es casi imposible ubicarlos. Basta recordar el desabastecimiento y la subida de precios del combustible en los Estados Unidos de mediados del 2021, consecuencia directa del ataque con ransomware a la empresa Colonial. Aquí entran nuevas soluciones en materia de ciberseguridad. Desgraciadamente hoy en día uno de los puntos más flojos en materia de seguridad empresarial es la informática, y es el punto que aprovechan los hackers y ciberdelincuentes para ingresar a hacer de las suyas.
El primer paso para una buena seguridad es la estrategia. Planear para lo peor y prevenir para mitigar los daños. Hoy en día hay muchas empresas que se dedican a la ciberseguridad, y no podemos dejar de destacar el rol que cumplen. Sistemas de firewall, alertas automatizadas, y sistemas sincrónicos de backup son solo algunas de las soluciones de vanguardia para estar protegido ante ataques que eventualmente, sucederán. Sin duda alguna hay que cuidarse de los ransomware, los DDoS y los ataques botnet.
Yendo nuevamente hacia el metaverso, sabemos que Facebook será pionero y se está perfilando como el primer gigante de los tecnológicos en apostar fuertemente a este concepto. Ya hemos discutido en este blog sobre esto, sobre como el Metaverso cambiará la forma en la que nos relacionamos con nuestros amigos y conocidos en el mundo virtual. Si bien tiene muchos detractores, Facebook -ahora llamada simplemente Meta- también los tenía cuando arrancó, y tan mal no le ha ido.
Desde el metaverso podremos hacer todo lo que hacemos en nuestra vida real. Bueno, obviamente con las limitaciones de la realidad virtual. Pero cada día vemos como esos límites se van difuminando cada vez más. Dentro de algunos años, podremos quedar con nuestros amigos para ir por unas cervezas virtuales en un bar en Berlín, o asistir a un recital virtual de nuestra banda favorita. O porqué no, ir con nuestra pareja a tener una cena romántica en la Torre Eiffel virtual. ¡Se proyecta que hasta podremos tener relaciones sexuales con otras personas en otras partes del mundo utilizando periféricos diseñados especialmente para la experiencia! Incluso ya existen agencias inmobiliarias virtuales, a través de las cuales podemos comprar terrenos e inmuebles virtuales en los cuales podemos edificar nuestra casa o negocio virtual. Luego incluso podremos alquilar esos mismos edificios a otros emprendedores que quieran pagar por dichos alquilieres.
Desde luego que faltan varios años para que todo esto tome vida, pero sin dudas es un proyecto interesante para analizar y -¿porqué no?- invertir algunos ahorros que estemos dispuestos a perder si no sale bien.