Si bien las VPN (Virtual Private Network, o Red Privada Virtual) tienen bastantes años en el mercado, la pandemia y el teletrabajo ha hecho que muchísimas más personas utilicen estos servicios todos los días. En pocas palabras, las VPN son una medida de seguridad adicional para autenticar usuarios y equipos, de manera que las conexiones realizadas desde cualquier parte del mundo pasen por varios niveles de autenticación. Esto hace que la posibilidad de ataques cibernéticos y vulnerabilidades se reduzca considerablemente.
Si bien son una barrera de seguridad muy efectiva, ya se sabe que las computadoras cuánticas -la nueva generación de super computadoras en desarrollo actualmente- puede vulnerarlas en segundos aprovechando su potencia de procesamiento sin precedentes. Esto obliga al desarrollo de nuevas tecnologías de VPN para adelantarse a la llegada de la computación cuántica. Pues bien, la empresa norteamericana Verizon, un proveedor de telecomunicaciones inmenso, ha testeado una VPN establecida desde Londres a Virginia contra el ataque de una computadora cuántica y ha salido exitosa.
Tampoco es para salir corriendo a buscar una VPN que aguante un ataque de estas características. Las computadoras cuánticas están todavía en fase de desarrollo, y pasarán décadas antes de que estén al alcance de los piratas informáticos. Pero lo interesante es que el problema ha sido detectado a tiempo y ya está desarrollándose la criptografía post-cuántica.
De todos los algoritmos desarrollados por Verizon, Sabre es el nombre del que han utilizado para esta prueba. Es uno de muchos, informan, y probarán otros en otras oportunidades. Pero este ha dado en el clavo y ha demostrado soportar el ataque.
Si bien la computación cuántica no estará disponible para el grueso de la población durante varias décadas más, nunca está de más adelantarse a lo que viene. Estamos seguros de que los piratas informáticos esperan con muchas ansias hacerse con una de estas computadoras, pero si podemos estar un paso delante de ellos, mucho mejor.